Por Nelson Lombana Silva
Torrencial aguacero presentado en la zona paramuna desde la madrugada de ayer, provocó el desbordamiento del río Combeima generando pánico entre los habitantes y pérdidas millonarias. Afortunadamente, hasta el momento no se han presentado pérdidas humanas. La administración municipal desplegó todas las secretarias con el fin de prestar los primeros auxilios y hacer un censo detallado de las personas damnificadas.
Durante todo el día de ayer, hasta bien entrada la noche, el cuerpo de bomberos, la defensa civil y funcionarios de la alcaldía, hicieron presencia en la zona prestando solidaridad y recogiendo la información con el fin de cuantificar y cualificar la magnitud del siniestro que dejó a numerosas familias humildes a la intemperie con la pérdida de sus pocos enseres. La red municipal de bibliotecas públicas de Ibagué, participó activamente en esta actividad. Según la doctora Greis Cifuentes, secretaria de cultura, un fenómeno de esta magnitud no se presentaba en veinte años.
Los habitantes del imponente Cañón del Combeima no durmieron después de las dos de la mañana cuando se dio la voz de alarma. Comunidades de Juntas, Villa Restrepo, Pastales, Llanitos, Chapetón, entre otras, estuvieron en máxima alerta acatando los protocolos de seguridad para estos casos. “No estaba en la zona, pero al darme cuenta del suceso dimos la señal de alerta y permanecimos atentas al desarrollo de los acontecimientos”, dijo la lideresa Olga de Pérez. Por su parte, Consuelo Vásquez, indicó que el rugir del río era inmenso y que la quebrada aledaña al cementerio se desbordó también, sin la pérdida de vidas humanas afortunadamente”.
Por su parte, la bibliotecaria de Juntas, Nayi Carolina Molina, dijo que “desde las dos de la mañana estaba en pie, en la calle, al lado de la comunidad, pendiente del desarrollo de los acontecimientos. Un muro fue llevado por la creciente, un árbol taponó la carretera y el torrencial aguacero acompañado de truenos y relámpagos estremecieron con ímpetu la región”. La policía en Llanitos impidió el paso de personas y vehículos debido al taponamiento de la vía por la erosión, el crecimiento de los riachuelos y quebradas que desembocan en el río Combeima.
Fotos Red Bibliotecas y Cultura Total.
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