Menor proveniente de la Alta Guajira fue ingresado a una UCI en Riohacha en grave estado de salud.
Profesionales de la ONG Nación Wayú activaron en el municipio de Uribia, la ruta de atención de un menor de un año de edad, con problemas de desnutrición, lo que permitió que funcionarios del ICBF regional Guajira, llegarán hasta el sitio y coordinarán su atención e intervención médica.
El menor debió ser trasladado a una Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) en la ciudad de Riohacha, debido a su delicado estado de salud, tras ser estabilizado en una clínica en Uribia.
“El equipo móvil de la Unidad de búsqueda de niños desnutridos del ICBF,detectó que el niño presentaba un grave estado de desnutrición, lo que había conllevado a la resequedad en su piel y por consiguiente el deterioro en su salud”, señaló a través de un comunicado la ONG.
El menor es oriundo de la comunidad indígena Malirra-Jotimana, en el corregimiento de Bahía Honda, en la Alta Guajira y fue trasladado por sus abuelos quienes se encuentran al frente de su cuidado, desde esta localidad hasta la cabecera de Uribia.
La madre del niño falleció hace dos meses, dejándolo huérfano junto a sus otros tres hermanos.
Ya en Uribia, Pedro Epieyu Epinayu, autoridad tradicional de la comunidad y abuelo del menor, solicitó ayuda a la organización de Derechos Humanos Nación Wayú.De inmediato voluntarios de esta organización se trasladaron hasta el barrio Villa Fausta, ubicado en una zona vulnerable, para analizar la situación del menor.
“Su abuela, en medio de lagrimas y desespero intentaba calmar el llanto de dolor que se desprendía de las entrañas de este niño, que presentaba a simple vista un grave deterioro en su salud, pues su piel estaba totalmente reseca y con llagas que supuraban un liquido espeso de color amarillo”, relató este organismo.
Aunque habían viajado por más de tres horas para salvarle la vida a su nieto, los abuelos tenían miedo de acudir a un centro hospitalario.
Temían a que las instituciones del Estado, le quitarán la custodia del menor, por lo que fue necesario un trabajo de sensibilización para que accedieran a su traslado.
“Con amplio conocimiento y consentimiento de los tutores del niño, buscando salvaguardar y garantizar sus derechos, los profesionales de la ONG se comunicaron con la directora del ICBF Regional La Guajira Yaneris Cotes Cotes, contextualizándola de la situación”, señaló Nación Wayú.
También, fue notificada la secretaría de Salud municipal, para ordenar la remisión del niño hasta un centro hospitalario.
La ong hizo un llamado a las instituciones, organizaciones, profesionales, lideres indígenas y a la ciudadanía en general, de ayudar a los más vulnerables, sin diferencias ni egoísmos, “ayudar no es solo esperar a que los niños se mueran de hambre, para luego llegar cual redentor, tomar fotos y denunciar al estado colombiano por su negligencia y abandono”.
Eliana Mejía Ospino
Especial para El Tiempo
Riohacha
“El equipo móvil de la Unidad de búsqueda de niños desnutridos del ICBF,detectó que el niño presentaba un grave estado de desnutrición, lo que había conllevado a la resequedad en su piel y por consiguiente el deterioro en su salud”, señaló a través de un comunicado la ONG.
El menor es oriundo de la comunidad indígena Malirra-Jotimana, en el corregimiento de Bahía Honda, en la Alta Guajira y fue trasladado por sus abuelos quienes se encuentran al frente de su cuidado, desde esta localidad hasta la cabecera de Uribia.
La madre del niño falleció hace dos meses, dejándolo huérfano junto a sus otros tres hermanos.
Ya en Uribia, Pedro Epieyu Epinayu, autoridad tradicional de la comunidad y abuelo del menor, solicitó ayuda a la organización de Derechos Humanos Nación Wayú.De inmediato voluntarios de esta organización se trasladaron hasta el barrio Villa Fausta, ubicado en una zona vulnerable, para analizar la situación del menor.
“Su abuela, en medio de lagrimas y desespero intentaba calmar el llanto de dolor que se desprendía de las entrañas de este niño, que presentaba a simple vista un grave deterioro en su salud, pues su piel estaba totalmente reseca y con llagas que supuraban un liquido espeso de color amarillo”, relató este organismo.
Aunque habían viajado por más de tres horas para salvarle la vida a su nieto, los abuelos tenían miedo de acudir a un centro hospitalario.
Temían a que las instituciones del Estado, le quitarán la custodia del menor, por lo que fue necesario un trabajo de sensibilización para que accedieran a su traslado.
“Con amplio conocimiento y consentimiento de los tutores del niño, buscando salvaguardar y garantizar sus derechos, los profesionales de la ONG se comunicaron con la directora del ICBF Regional La Guajira Yaneris Cotes Cotes, contextualizándola de la situación”, señaló Nación Wayú.
También, fue notificada la secretaría de Salud municipal, para ordenar la remisión del niño hasta un centro hospitalario.
La ong hizo un llamado a las instituciones, organizaciones, profesionales, lideres indígenas y a la ciudadanía en general, de ayudar a los más vulnerables, sin diferencias ni egoísmos, “ayudar no es solo esperar a que los niños se mueran de hambre, para luego llegar cual redentor, tomar fotos y denunciar al estado colombiano por su negligencia y abandono”.
Eliana Mejía Ospino
Especial para El Tiempo
Riohacha
Fuente: Estasucediendo.com
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