“¡Mi hijo, mi hijo!, me lo mataron. Hijo levántese, abra los ojos.”
Padre de Brayan Santiago Pama, menor asesinado
Padre de Brayan Santiago Pama, menor asesinado
Por: Marina López Espinosa
Tal vez por la penosa asociación que a lo largo de su historia ha debido tener con ella, hay una palabra que el pueblo colombiano incorporó en su genética como la más odiosa del idioma español. Uno tan rico en bellas y delicadas voces, “bajel, malaquita, almena, atril, salterio, sirena, tisú, azahar, astillero”, tenía que traer una sin atenuantes, repulsiva: Masacre.