La Habana.- Representantes del cuerpo diplomático acreditado en Cuba recibieron hoy una detallada explicación sobre el Plan nacional de soberanía alimentaria y educación nutricional, que entre otros propósitos busca elevar la producción agropecuaria y sustituir importaciones.
El presidente del Parlamento, Esteban Lazo, encabezó el encuentro, en el cual participaron ministros de diferentes carteras, el representante de la Organización de Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) en la isla, Marcelo Resende, y el asesor de este organismo para dichos temas, Frei Betto, entre otros.
El titular cubano de la Agricultura, Ydael Pérez, refirió en la presentación que el Plan se sustenta en el derecho de la población a una alimentación sana y adecuada, y es una plataforma para lograr la seguridad en este ámbito, un aspecto de importancia estratégica para el país.
Recordó que Cuba lleva más de seis décadas sometida a un férreo bloqueo económico, comercial y financiero por parte de Estados Unidos, el cual tiene un impacto negativo en la producción agropecuaria y la importación de alimentos, a lo cual se suman las afectaciones derivadas del cambio climático y de la actual crisis por la Covid-19.
Esos factores refuerzan la necesidad de promover transformaciones que conduzcan a un incremento de los recursos propios, a la vez que se fomenta una cultura y educación alimentarias para el logro de la mejora de salud de la población cubana, comentó Pérez.
El titular resaltó que el Plan fue construido con participación de todos los sectores de la economía, universidades e investigadores, de manera que destaca por su intersectorialidad, interinstitucionalidad e interdisciplinariedad.
Pérez aludió a las acciones realizadas bajo las guías del Plan, que contemplan medidas de diversa índole, como la aplicación de la ciencia a la producción y las financieras, que incluyen la implementación de la banca de fomento agrícola.
Señaló que otra esfera de actuación es la búsqueda de la calidad e inocuidad de los alimentos, y el desarrollo de un programa inclusivo, de empoderamiento de toda la sociedad y con una mayor integración de los jóvenes.
El ministro cubano subrayó que la localidad es el corazón de lo previsto en el Plan, porque todo cuanto se haga a pequeña y mediana escala resulta muy sostenible, además de proporcionar empleo y cambiar el panorama económico social de las comunidades.
Durante la presentación invitó al personal diplomático acreditado en la nación caribeña a cooperar con el país para llevar a feliz término los objetivos propuestos, y los convocó el 23 de febrero a un intercambio con las agencias de colaboración presentes en Cuba.
Prensa Latina
El titular cubano de la Agricultura, Ydael Pérez, refirió en la presentación que el Plan se sustenta en el derecho de la población a una alimentación sana y adecuada, y es una plataforma para lograr la seguridad en este ámbito, un aspecto de importancia estratégica para el país.
Recordó que Cuba lleva más de seis décadas sometida a un férreo bloqueo económico, comercial y financiero por parte de Estados Unidos, el cual tiene un impacto negativo en la producción agropecuaria y la importación de alimentos, a lo cual se suman las afectaciones derivadas del cambio climático y de la actual crisis por la Covid-19.
Esos factores refuerzan la necesidad de promover transformaciones que conduzcan a un incremento de los recursos propios, a la vez que se fomenta una cultura y educación alimentarias para el logro de la mejora de salud de la población cubana, comentó Pérez.
El titular resaltó que el Plan fue construido con participación de todos los sectores de la economía, universidades e investigadores, de manera que destaca por su intersectorialidad, interinstitucionalidad e interdisciplinariedad.
Pérez aludió a las acciones realizadas bajo las guías del Plan, que contemplan medidas de diversa índole, como la aplicación de la ciencia a la producción y las financieras, que incluyen la implementación de la banca de fomento agrícola.
Señaló que otra esfera de actuación es la búsqueda de la calidad e inocuidad de los alimentos, y el desarrollo de un programa inclusivo, de empoderamiento de toda la sociedad y con una mayor integración de los jóvenes.
El ministro cubano subrayó que la localidad es el corazón de lo previsto en el Plan, porque todo cuanto se haga a pequeña y mediana escala resulta muy sostenible, además de proporcionar empleo y cambiar el panorama económico social de las comunidades.
Durante la presentación invitó al personal diplomático acreditado en la nación caribeña a cooperar con el país para llevar a feliz término los objetivos propuestos, y los convocó el 23 de febrero a un intercambio con las agencias de colaboración presentes en Cuba.
Prensa Latina
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