El Gobierno de Iván Duque comete un etnocidio contra el pueblo colombiano, bajo la subordinación de los intereses de Estados Unidos, dice una analista.
Unos 3000 indígenas colombianos, 130 autoridades y representantes de comunidades ancestrales incluidos, marcharon el sábado en la ciudad de Cali, la capital del Valle del Cauca, para denunciar la violencia armada, la indiferencia del Gobierno de Iván Duque y otros problemas estructurales.
Al respecto, en una entrevista concedida este domingo a la cadena de HispanTV, la investigadora María Fernanda Barreto ha asegurado que, en Colombia, el Estado no es protector, sino que está abocado en cometer un ecocidio contra las comunidades indígenas y negras.
“Esto deriva de una política subordinada del Gobierno colombiano al Gobierno de EE.UU. y al imperialismo capitalista en general que está pretendiendo ejecutar un ecocidio sobre nuestra América y para ello ha decidido masacrar a esa comunidad que tienen tanto arraigo en el territorio”, ha enfatizado.
Barreto ha denunciado que el ecocidio ejercido por el Gobierno de Iván Duque forma un plan imperialista sobre América y Colombia que tiene repercusiones muy dramáticas. El pueblo colombiano viene denunciando el asesinato de decenas líderes sociales y el desplazamiento de más de mil indígenas de sus tierras natales.
La investigadora ha calificado la situación en Colombia de grave y ha asegurado que hay una responsabilidad directa del Estado en la situación de violencia contra el pueblo colombiano y particularmente contra las comunidades indígenas.
En los últimos años, debido a falta de compromiso del Gobierno en la implementación del acuerdo de paz, y a la decisión de algunos excombatientes de regresar a las armas, el conflicto se ha recrudecido en áreas históricamente afectadas por la violencia.
Según las más recientes cifras del Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz (Indepaz), durante este año, 53 líderes indígenas y activistas de los derechos humanos han sido asesinados en Colombia. Por su parte, la oficina de la ONU de Derechos Humanos en Colombia, ha verificado 67 homicidios de personas defensoras, de las cuales 13 son indígenas o afrodescendientes, y está verificando nueve más.
Fuente: HispanTV Noticias
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