sábado, 25 de septiembre de 2021

Alemania: El rompe cabezas para conformar gobierno Elecciones, expectativas, proyecciones y el efecto Merkel


 Por Eliécer Jiménez Julio


Berlín, Alemania A menos de 24 horas de que se abran los colegios electorales para las elecciones aquí en Alemania y cuando el voto por correo es muy fuerte el ambiente de indecisión entre el electorado alemán prima; mientras las campañas están a fondo en la recta final a punto que la propia Greta Thunberg participa en manifestaciones en la defensa del medio ambiente, señalando de paso que “Los partidos políticos no hacen lo suficiente contra el cambio climático. De otra parte la propia canciller Angela Merkel, próxima a dejar su cargo vuelve a hacer campaña este sábado por su candidato Armin Laschet, hasta hace poco dado como perdedor ante el socialdemócrata Olaf Scholz, cuya ventaja ahora es tan pequeña que el resultado es impredecible.

 


 Pronósticos cerrados

Los pronósticos son muy cerrados especialmente con un margen de uno a dos puntos porcentuales así: SPD (socialdemócratas): 26% cuyo candidato es Olaf Scholz, en casi un empate técnico por CDU/CSU (conservadores): 25% representado por   Armin Laschet o como se le conoce aquí el candidato de Merkel. En tercer lugar se encuentran los verdes con 15 % y cuya candidata Annalena Baerbock, a bajado mucho en las encuestas y algunos aseguran que despues de tener mucha ventaja ella misma se derrotó cuando plagió varias páginas de su libro y eso aquí en Europa es imperdonable entre los electores incluso de su propio partido.

Las encuestan señalan posteriormente a los FDP (liberales, con 11% empatados con la AfD (extr derecha) y el partido Die Linke (izquierda) con 6 %.

Ninguno solo formará gobierno

Lo que se puede asegurar desde ya es que ningún candidato o agrupación política por si sola logrará formar gobierno, de allí que desde la semana pasada el candidato socialdemócrata Olaf Scholz haya tendido la mano a los verdes «Me gustaría gobernar con Los Verdes. He colaborado con ellos en varios ejecutivos, tanto a nivel nacional como en Hamburgo», dijo el ministro federal de Finanzas y exalcalde de la ciudad portuaria alemana. La socialdemocracia alemana es como la centroizquierda en algunos países latinoamericanos.

El rompecabezas para formar gobierno

Aquí no se descarta nada, incluso puede haber la posibilidad de que se de el Gobierno CDU/CSU/SPD como en la actualidad y pueda seguir, pero con muy pocos escaños y sería muy poca ventaja como para arriesgarse y a lo mejor no duraría los cuatro años, además ya llevan doce de los últimos dieciséis años juntos pero la gente está cansada de esto mismo y piden cambios. Tampoco habla a favor de esta posibilidad continuista de que los conservadores no quieren seguir siendo segunda fuerza después de un canciller como Scholz, aunque éste no se diferencia en mucho de la Sra Merkel.

Por si realmente fuera la primera fuerza el SPD, puede hacer una coalición con verdes y Die Linke si Die Linke supera el 5% y los Verdes no pierden aún más votos de lo que ya han perdido.

Pero las pocas posiciones firmes de Die Linke respecto a la OTAN lo harán imposible.  Además estos ya no defienden a ningún país socialista, tampoco están completamente en contra de "misiones" militares al extranjero, pero sí les cuesta aceptar a los EEUU como « mejor amigo ». Y están a favor de la "disolución" de la OTAN.

Queda SPD con Verdes y FDP. Posible, pero el FDP está rigurosamente en contra de cualquier aumento de tasación de los ricos y las empresas. Difícil sería financiar los proyectos de SPD y Verdes sin aumento de los ingresos estatales, especialmente en los temas de cambio climático y estado social, como rentas etc.

También existe otra opción dentro de la compleja política electoral alemana y es que el partido ganador en las elecciones quede por fuera y no gobierne y es la coalición sin el (posible) ganador SPD: De CDU/CSU con FDP y Verdes.

Anoche, en el último debate, Baerbock de los Verdes indirectamente dio luz verde para tal constelación. La única opción con la que los socialdemócratas quedarían fuera del juego. Solo hubo un caso en el que el ganador finalmente no llegó a ser parte del Gobierno: En 1976 cuando SPD y FDP juntos superan a CDU/CSU.

Muchos se inclinan por la coalición entre los tres más fuertes, o sea seguir SPD con CDU/CSU, pero con ayuda de los Verdes. Aquí nada es seguro por el momento.

Mucho indica que casi todo depende del FDP. Lo cierto es que nadie quiere hacer una coalición con el AfD (extrema derecha), o sea queda descartado que la derecha extrema pueda incidir en un Gobierno.

Efecto y la nostalgia Merkel

Podemos llamarlo "efecto Ángela Merkel". Cuando a pocas horas de las elecciones y se vio durante toda la campaña aquí en Alemania muchos votantes alemanes parecen incapaces de sobreponerse al hecho de que la Canciller, que ha dirigido el país durante cuatro mandatos, no se presente.

En la última semana de campaña, Merkel llevó a Laschet a su feudo en la costa del Báltico, y ayer viernes encabezó el mitin de cierre de campaña en Múnich. El canciller apeló al electorado de mayor edad, predominante en Alemania, al que pidió mantener a sus conservadores en el poder en aras de la estabilidad. "Para que Alemania siga estable, Armin Laschet debe convertirse en el canciller federal y la CDU y CSU deben ser la fuerza principal", pidió.

Hoy sábado, en el cierre de la campaña, está acompañando a Laschet a su feudo electoral en Aquisgrán, cerca de la frontera con Bélgica y Holanda, donde nació y aún vive el candidato.
No sabemos por quién votar
Un sondeo del Instituto Allensbach, mostró esta semana que un 30% de los que planean votar mañana 26 de septiembre aún no han decidido cómo hacerlo, y la mayoría dice que no se sienten atraídos por ninguno de los contendientes.

"Ninguno me convence", dice Janis Schulz, de 35 años, de Renania del Norte-Westfalia, consultado sobre qué candidato prefiere. "Da igual a quien votemos, seguramente formarán una coalición, pero no se sabe con quién (...), además es difícil después de Merkel. Ella trajo la calma, a Alemania y a Europa". Tampoco parece haber desanimado a los alemanes a la hora de votar, ya que el 87% de los encuestados por Allensbach dice que piensan acudir a las urnas, aunque muchos dicen que no ven a nadie en quien realmente confíen y que seguramente elegirán un "mal menor".

Europa expectante


La política europea hasta ahora no ha jugado prácticamente ningún papel en la campaña electoral alemana. Recordemos que los tres candidatos son Olaf Scholz, del Partido Socialdemócrata (SPD), Armin Laschet, de la Unión Demócrata Cristiana (CDU) y Annalena Baerbock, de Los Verdes. La Unión Europea (UE) aún no conoce a fondo cuáles son los planes de cada uno de ellos para Europa, ellos han preferido centrarse en ganar el favor electoral interno y por respeto a los vecinos prefieren por el momento no arriesgar nada, aquí cualquier error se paga.

Los jefes de los gobiernos socialdemócratas desde Suecia, Finlandia y Dinamarca, hasta Malta, España y Portugal, se alegrarían si el socialdemócrata Olaf Scholz ocupara la Cancillería, tras 16 años de Merkel. A la inversa, sería igual de lamentable para los ocho jefes de gobierno conservadores que el mayor país de la UE dejara de estar dirigido por un democristiano.

¿Y los propios europeos que piensan? Según una encuesta realizada por el laboratorio de ideas Consejo Europeo de Relaciones Exteriores, la mayoría de los europeos encuestados querían a su jefa de crisis de la UE, Angela Merkel, porque representaba confiabilidad. Los encuestados también esperan fiabilidad y una política fiscal mesurada por parte de Alemania con un nuevo gobierno. Sin embargo, en general, los europeos consideran que la "edad de oro" de Alemania está llegando a su fin.

Cambio Climático en campaña

La lucha contra el cambio climático es uno de los principales temas de la campaña electoral alemana. Pero ningún partido lograría, con su programa, alcanzar las metas del Acuerdo de París y como ya anotamos la propia Greta Thunberg se encuentra aquí para apoyar esta lucha: « Sí, debemos votar y ustedes deben votar. Pero no olviden que el voto solo no bastará. Debemos continuar saliendo a la calle y exigiendo a nuestros dirigentes que tomen medidas concretas a favor del clima », agregó la activista, aclamada por la multitud en un discurso ante el Reichstag de Berlín, sede del Parlamento alemán.
No habrá ruptura con la UE

Pero Alemania seguirá siendo el Estado miembro más grande, más poderoso económicamente y más influyente, independientemente de quién esté en la Cancillería. No habrá una gran ruptura dramática en la política europea de Alemania, cree el director del Centro para las Políticas Europeas, Janis Emmanouilidis. Entre los funcionarios alemanes de la UE prevalece la compostura pragmática. Por ahora, dicen, el trabajo continuará con normalidad, independientemente de quién gane las elecciones. Las grandes decisiones se pospondrán hasta que el nuevo gobierno se haya instalado.

Sábado 25 de septiembre

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