Habla el presidente de Fensuagro y abogada del Comité Permanente por la Defensa de Derechos Humanos.
Tegucigalpa – Bogotá.- La indígena y campesina Cecilia Coicue de 65 años, quiso aportar al proceso de paz y ofreció al Estado y a las Farc sus 70 hectáreas en el municipio de Corinto, departamento del Cauca, para así facilitar el avance del proceso. Unos días después fue vilmente torturada y asesinada a 200 metros de su sencilla finca. ¿Quién tiene interés en torpedear el proceso en esa zona de Colombia?
Las encuestadoras dan una victoria abrumadora al Bloque del “SI” y una humillante derrota a los sectores que apunta a un “NO”, encabezados por Uribe-Pastrana-ex Procurador Ordóñez, en el plebiscito que se va a realizar el 2 de octubre, año en curso.
Para cualquier persona con un mínimo de conocimiento de la historia de Colombia es conocido que los sectores fácticos y poderosos del país siempre han intentado poner trabas en todos los procesos políticos que mueven su poder en el país suramericano. No hay duda que el SI ganará el referendo. La pregunta lógica es: ¿cuál será y cómo será la transformación de la insurgencia de las Farc a un movimiento netamente político y qué y cómo actuarán en los diferentes territorios en donde han actuado históricamente después que los fusiles hayan sido empacados y enviados por los representantes de la ONU?
La región en donde se encuentra el municipio de Corinto ha sido un histórico bastión del 6º Frente de las Farc, un Frente “Madre”, fundador de otros. La zona está muy militarizada con varios batallones, Fuerzas Especiales y Batallones de Alta Montaña, todos con respaldo de la Aviación Colombiana.
En la región del municipio de Corinto, Cauca, hay una fuerte militarización por parte de las FFMM. Y ahí, inexplicablemente opera el paramilitarismo de las Águilas Negras.
Para saber más sobre el asesinato, los diferentes actores que podrían estar detrás de este lamentable asesinato y qué implicaciones puede tener para el éxito del proceso de paz, Resumen Latinoamericano habló con Érika Gómez, abogada del Comité Permanente por la Defensa de Derechos Humanos:
Érika Gómez, CPPDH.
[Audio] ABOGADA ERIKA GOMEZ de CPPDH:
– Nosotros, tanto como defensores de los derechos humanos como líderes sociales, políticos y populares pues vemos esto como un fuerte mensaje precisamente para generar miedo, zozobra e incertidumbre para este momento histórico en el cual nos encontramos.
– Creo que es preocupante de resaltar que la compañera Cecilia Coicué era la dueña del predio en donde iba a ser una de las zonas veredales (en donde se concentrará parte de las tropas guerrilleras). Creo que eso es un mensaje muy fuerte a los sectores que apoyamos el actual proceso de sectores guerreristas.
La coyuntura actual sobre la protección a los defensores de derechos humanos en Colombia es horrorizante. Según la ONG “Somos defensores” durante el primer semestre del 2016 unos 35 defensores de DDHH han sido asesinados. Otros 279 han sido víctimas de otro tipo de agresiones. De las 232 amenazas de muerte la organización paramilitar Águilas Negras son firmantes de 119 amenazas mientras la Escuadrón de la Muerte AGC (Autodefensas Gaitanistas de Colombia), son responsable de 51 casos.
Paramilitares de Águilas Negras con la amenaza a muerte (enmarcada) a los integrantes de once movimientos populares en el norte de Cauca donde se encuentra Corinto.
La guerrilla de las Farc, preocupada por el asesinato de Coicué y otros tres líderes campesinos de la misma región, asesinados el 29 de agosto, expidió un duro comunicado firmado por su máxima instancia, el Secretariado del Estado Mayor Central el 8 de septiembre. El punto de la Agenda sobre la protección a los guerrilleros desmovilizados era uno de los puntos que más debate creó entre las dos delegaciones en La Habana.
500 líderes campesinos asesinados
Cecilia Coicué era miembro de Fensuagro, la mayor organización campesina en Colombia con miles de miembros en el departamento del Cauca, sacudido durante muchos años de lucha por una reforma agraria. Hablamos con Eberto Díaz Montes, presidente de Fensuagro que justo, cuando le llamamos estaba en negociaciones con el gobierno sobre cómo aplicar el Acuerdo Final al campo colombiano.
Eberto Díaz Montes, Fensuagro.
[Audio] EBERTO DIAZ MONTES, Fensuagro
– El asesinato de Cecilia es un asesinato en la culminación del proceso de paz entre las Farc y el gobierno. Sabemos que el proceso cuenta con muchos enemigos latifundistas, ganaderos, agronegocios y sectores militaristas que se oponen a la solución política negociada. Andan buscando con la manera en el último tramo de este proceso poner palanquera para que efectivamente la solución política tenga algunas trabas que finalmente puedan echar por atrás cualquiera posibilidad de paz en el país. Sin embargo sabemos que estos sectores cada vez son más aislados.
– Esta (Cauca) es una de las zonas más ricas y biodiversas que tenemos en Colombia. El Macizo Colombiano se destaca por ser una región de muchas riquezas hídricas y detrás de la riqueza hídrica vienen las hidroeléctricas, viene la empresa privada que negocia con el agua, van las grandes transnacionales embotelladoras de gaseosa (Coca- y Pepsi Cola y sus aliados colombianos) y cervecerías. Pero es también una región donde avanzan los monocultivos de la caña de azúcar, la ganadería y también la extracción minera. La región es muy rica en oro y diversos minerales.
Mejor dicho; ¿es una zona muy caliente para el Gran Capital?
– Si, además es una zona con una fuerte presencia de varias comunidades indígenas. La población del Cauca es casi 80 por ciento indígena y también una gran fracción de campesinos. Significa que es una región que en algunas partes es de sobrepoblación indígena que cada vez es más arrinconada y avanzan los agronegocios, las minerías, el latifundio. Todo esto hace parte de combustible para acelerar el conflicto (social) que por muchas décadas se ha desarrollado en esta región del Macizo Colombiano.
El gobierno de Juan Manuel Santos subrayaba desde el inicio de las negociaciones en La Habana, que las millones de hectáreas de las de los terratenientes, mineras u otros industriales en el campo no serían tocados un milímetro cuadrado, lo que el jefe de la delegación de las Farc reclamaba en su intervención al iniciar las negociaciones en La Habana.
– Estamos en la Cumbre Agraria durante dos días con el gobierno y precisamente acaban de decir eso. “El Acuerdo con las Farc no es compra de tierras o expropiación de predios”. Es más la formalización de las tierras que tienen los campesinos y que no se han titulado durante mucho tiempo. Nosotros (Fensuagro) estamos por una solución política del conflicto armado porque efectivamente el 2 de Octubre se aprueba o no el Acuerdo de Paz. Pero tenemos también el inconformismo porque el gobierno y la burguesía no quieren aceptar que para que haya paz tiene que haber distribución de las riquezas y de las tierras. El Modelo del Libre Comercio tiene que ser revisado. En general, la política en Colombia tiene que ser concertada con la población colombiana.
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