Entre el 21 de junio y el 27 de diciembre de 1996, los paramilitares del Magdalena Medio al mando de Ramón Isaza, incursionaron en la Vereda La Esperanza del municipio del Carmen de Viboral en el Oriente Antioqueño. Allí asesinaron un campesino, desaparecieron a 15 más y secuestraron a un bebé. Veinte años después sus habitantes exigen conocer la verdad y que se haga justicia en este caso. Como este doloroso episodio existen cientos de ellos en un país que clama conocer la verdad acerca de quiénes fueron los responsables de estos crímenes.
La activista defensora de derechos humanos María José Pizarro, sostiene que para poder avanzar en la construcción de paz en el país es necesario que se reconstruya la memoria en favor de las víctimas.
María José Pizarro, hija del asesinado dirigente del M-19 Carlos Pizarro León Gómez, aseguró que en Colombia se necesita conocer el paradero de los más de seis mil desaparecidos que ha dejado el conflicto armado.
Un país como Colombia no puede avanzar hacia la paz si no comienza a trabajar por la búsqueda de los más de sesenta mil desaparecidos que existen.
Esta defensora de derechos humanos asegura que es una convencida de la paz con justicia social, pero sostiene que para que sea una realidad se necesita conocer los responsables de la barbarie que ha ocurrido los últimos 60 años en el país.
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