sábado, 1 de octubre de 2016

Notas al sol: Momento histórico

Zabier Hernández Buelvas


Es una nueva etapa de la lucha política y social, donde los comunistas aportaremos toda nuestra experiencia y capacidad a la potencia transformadora del pueblo, a la unidad estratégica de los revolucionarios, con plena conciencia del papel que nos toca jugar.



26 de septiembre de 2016, día histórico para la nación, día histórico para los que hemos luchado incansablemente por la paz, hasta en los tiempos más oscuros de la guerra.


Los comunistas hemos aportado vidas que aún persisten y son parte de lo que hoy se firma, se construye y se proyecta, hemos aportado muertos por los cuales seguimos alimentados de una memoria fértil de esperanza y firmeza en la lucha y seguimos aportando convicción de la necesidad y la posibilidad de la paz.


Hablar hoy de los comunistas colombianos y el momento histórico es hablar de la lucha de un pueblo que no se doblegó ante los guerreristas y que prepara la gran gesta de cambios para un nuevo día. El momento histórico es el diálogo, los acuerdos, la firma y la refrendación, la X Conferencia de las FARC-EP y el 22 congreso de nuestro partido, pero sobre todo, es la continuidad de una lucha política abierta, unitaria, de masas y creativa.


El momento histórico es el ascenso dialéctico de una etapa cualitativamente diferente y nueva, un momento complejo de activación del proceso constituyente como proceso de cambio en la perspectiva de la lucha de clases. No hay tiempo a claudicaciones, no hay espacio a la confusión, es una nueva etapa de la lucha política y social, donde los comunistas aportaremos toda nuestra experiencia y capacidad a la potencia transformadora del pueblo, a la unidad estratégica de los revolucionarios, con plena conciencia del papel que nos toca jugar en este momento histórico y las luchas venideras.


El momento histórico no es el instante, no es la apariencia, no es el acto de Cartagena. El momento histórico es el todo, es lo inmediato – táctico, lo mediato y lo lejano – estratégico, es lo profundo, es la esencia que supera la formalidad para ubicarse en la realidad territorial.


El momento histórico es la retoma de la reelaboración y reconstitución de un sujeto político renovado, generoso, cohesionado y capacitado para estar en la vanguardia colectiva de los cambios, en la unidad dialéctica de las izquierdas y en el proceso de construcción de nuevas condiciones de lucha para el cambio hacia un nuevo poder y un nuevo gobierno nacido de las entrañas del pueblo y su poder constituyente. Reconocer el valor revolucionario del momento, nos coloca en la necesidad objetiva de la existencia del Partido Comunista, no como aparato, sino, como contingente de lucha dispuesto a darlo todo por la unidad del pueblo.



Los comunistas hemos aprendido que el “instante de un peligro” puede ser también el instante del estallido social y popular. Crear las condiciones para que ello sea así, convertir la semilla en proceso, convertir la herramienta en ruta y método y recoger los frutos para retroalimentar la lucha, es la tarea apremiante del momento histórico.


Semanario Voz




No hay comentarios:

Publicar un comentario